DEPRESIÓN
La depresión, junto con la ansiedad, es uno de los problemas más comunes por el que la gente busca ayuda profesional.
Además, la depresión y la muchas veces se presentan unidas y también forman parte de otros problemas psicológicos (adicciones, trastornos de alimentación, estrés, etc).
La depresión suele experimentarse como un abatimiento del estado de ánimo normal y se puede manifestar con distintos síntomas a lo largo de 2 semanas o más tiempo.
- Síntomas afectivos: tristeza, ira, distracción, llanto incontrolable, sentimiento de culpabilidad, vergüenza, ansiedad.
- Síntomas motivacionales: pérdida de motivación, tendencia a la evitación, dependencia.
- Síntomas Cognitivos: indecisión, percibir los problemas como abrumadores, autocrítica, pensamiento absolutista (todo o nada), problemas de memoria y dificultad para concentrarse.
- Síntomas conductuales: inactividad y pasividad.
- Síntomas fisiológicos: alteraciones del sueño, del apetito y reducción del deseo sexual, fatiga, dolor generalizado.
Existen varias situaciones que pueden interferir en el reconocimiento de la depresión:
- No todas las personas pueden reconocer y describir con precisión cómo se sienten.
- Hay personas que no se reconocen como deprimidas y lo que experimentan es una pérdida de placer o disminución del interés en sus actividades usuales.
- Los síntomas pueden ser muy diferentes de una persona a otra
- Una persona puede estar deprimida y sin embargo no mostrar su tristeza y desesperanza a la gente de su entorno ("depresión sonriente"), por lo que es difícil que identifiquen que tiene depresión.
El paciente con depresión grave se ve atrapado en un círculo vicioso: su bajo nivel de actividad hace que se considere a si mismo como un inútil. A su vez, esa etiqueta le produce desilusión y le lleva a un estado de inmovilidad.
Le resulta difícil pensar, leer, hablar así como realizar actividades complejas que exijan entrenamiento y/o habilidades especializadas.
La terapia cognitivo conductual es el tratamiento de primera elección para el tratamiento de la depresión leve y moderada, al igual que ocurre para otros problemas psicológicos como crisis de ansiedad, ansiedad generalizada, fobias, trastorno obsesivo compulsivo,etc a pesar de recetarse fármacos de manera abusiva para resolver estos problemas (que sí serán necesarios combinarlos con terapia psicológica en casos de mayor gravedad).
Además, a largo plazo, la dependencia excesiva de los fármacos puede impedir indirectamente la utilización por parte del paciente de sus propios métodos psicológicos para hacer frente a la depresión; algo que puede conseguir con los tratamientos psicológicos.
Si crees que estás atravesando una depresión, pide ayuda profesional ya que existen tratamientos psicológicos eficaces para superarla como la terapia cognitivo conductual.
En supera tu ansiedad Zaragoza se utiliza la terapia cognitivo conductual y las terapias de tercera generación, como la activación conductual, la terapia de aceptación y compromiso y mindfulness; seleccionando aquellas que resulten más adecuadas a cada paciente.